Por Javier ARIAS (*)
Mi actividad por estos años es la recuperación de suelos, mediante el aporte de abonos orgánicos. Es de anotar que estas tierras han sido sometidas durante los últimos 40 años a fuertes dosis de abonos químicos de síntesis para elevar su productividad. En un empiezo, me angustiaba porque los abonos que elaboraba eran muy completos: contenían elementos naturales para mejorar el PH, la retención de humedad y todos los nutrientes precisos para mejorar la calidad de las tierras; sin embargo, la productividad era menor a la tradicional y las personas no creían que de verdad mi método era mejor. Ellos necesitaban aumentar producción y yo no se los lograba.